El séptimo encuentro internacional de video consagró a los mejores del audiovisual. Durante cinco días se proyectaron 103 trabajos de diferentes países, además se produjeron cinco cortometrajes en cien horas. Los miembros del jurado analizan las tendencias y los retos que hay por delante.
Miguel Ángel Souza
Después de cinco días y de 103 proyecciones de trabajos elaborados dentro y fuera del país, el Festival Internacional de Video 2007 terminó ayer consolidándose como el semillero de los cineastas y realizadores de un futuro inmediato.
La cita coronó a una treintena de ganadores en las categorías profesional y universitaria (ver lista), pero además premió a cinco jóvenes realizadores que se consagraron como los mejores del proyecto Santa Cruz 100x100.
El grupo conformado por Kathia Calero (directora), Cristina Lora (productora), Andrea Camacho (fotografía), Juan Morales (sonido) y Juan Pablo Richter (edición) elaboró el cortometraje Milton en un periodo de 100 horas y el jurado le asignó la nota más alta.
Igual de alta es la puntuación general que los especialistas le dan el encuentro, que desde hace siete años es organizado por la Fundación Audiovisual (Fundav).
"Lo más importante es que se genera un espacio para ver, analizar y discutir sobre el audiovisual", destaca Oscar García, que junto a Eduardo López, Cesar Morón. Miguel Chávez y Christian Wiener se encargaron de evaluar los 103 trabajos en competencia. Sus palabras sirven de preámbulo para discutir sobre las tendencias, las fortalezas y las falencias de la situación actual de las producciones de Bolivia y algunos países de Sudamérica.
¿Qué contar?, lo mío o lo nuestro. Es el punto de partida cuando se habla de producciones audiovisuales. Según los integrantes del jurado, en este festival se vio una tendencia a relatar historias más personales, de los propios directores, algo así como el cine de autor.
Para los especialistas esto es bueno, en la medida que también se piense en los espectadores y no se exagere y se caiga en el error de llevar a la pantalla historias en los que la sociedad no se vea reflejada.
"Porque si nos miramos mucho al ombligo, también es contraproducente", asegura Chávez, realizador cruceño.
García, que ha musicalizado varios filmes nacionales, explica que es una tendencia en la que los noveles realizadores parecen más interesados en contar situaciones internas y no problemáticas comunes a la sociedad. "Hay una búsqueda de personalidad antes que identidad".
Además, uno de los puntos que señala el jurado es que las temáticas suelen ignorar casi por completo situaciones relacionadas con el humor o la sencillez de la vida "Es como que todo fuera muy triste. Hay que tomar en cuenta que a partir de relatos amenos también pueden salir buenos trabajos, explica Morón.
TECNOLOGÍA, ARMA DE DOBLE FILO
Una de las grandes ventajas que tienen en la actualidad los realizadores es el fácil acceso a la tecnología, algo que no sucedía en el pasado. El bajo costo de los equipos de filmación y las islas de edición, en cierta forma permiten que más personas puedan dedicarse a producir. "Hay una democratización, pero eso no implica que necesariamente mejore la narrativa, aclara López, presidente del jurado.
Aquí todas coinciden que antes que una buena cámara, lo que debe primar es una buena idea.
DIFUSIÓN, ASIGNACIÓN PENDIENTE
Después de solucionar el problema de qué contar (idea) y con qué contarlo (equipos), viene la gran incógnita: ¿cómo llegar al público?
Esta parece ser la cruz que siempre pesará sobre las producciones audiovisuales nacionales y también internacionales que surgen de manera alternativa. En el caso de los cortometrajes elaborados en video, Alejandro Fuentes reconoce que la difusión es cada vez más complicada. "Ni en las universidades hemos conseguido apoyo para que los trabajos se difundan de forma interna. Es algo que no se entiende", lamente el director del Fundav.
Pensar en llegar a grandes audiencias a través de los canales de televisión parece algo utópico. "Porque acá o en cualquier país de Sudamérica, las estaciones son poco abiertas a las cosas nuevas. Son círculos cerrados", asegura el peruano Wiener.
Pese a todas las barreras, algo que queda en claro es que la producción en video es el semillero de donde salen los ojos que a futuro contarán las historias de nuestras sociedades, ya sea a través de la pantalla chica de la TV o por medio del gran formato del cine.
La cita organizada por la Fundación (Fundav) se ha convertido en un espacio de exhibición, discusión y producción. Una alternativa para descubrir nuevos talentos
LOS PREMIADOS
COMPETENCIA PROFESIONAL
MEJOR CORTOMETRAJE
Rapsodia do Absurdo
Claudia Nunes (Brasil)
Se alquila
Luis González Zaffaroni (Uruguay)
Agua playa infinita (mención)
Luis Brun (Bolivia)
MEJOR FICCIÓN
Se alquila
Luis González Zaffaroni (Uruguay)
MEJOR DOCUMENTAL
Rapsodia do Absurdo
Claudia Nunes (Brasil)
MEJOR ANIMACIÓN
La Lupe I en Bruno
Marc Riba, Anna Solanas (España)
MEJOR DIRECTOR
Material Bruto
Ricardo Alves Junior (Brasil)
MEJOR PRODUCCIÓN
La leche y el agua
Celso García (México)
MEJOR FOTOGRAFÍA
La leche y el agua (México)
MEJOR EDICIÓN
Rapsodia do Absurdo (Brasil)
MEJOR DIRECCION DE ARTE
Se Alquila (Uruguay)
MEJOR GUIÓN
Sarean (España)
MEJOR MÚSICA ORIGINAL
Rapsodia do Absurdo (Brasil)
MEJOR BANDA SONORA
Se alquila (Uruguay)
MEJOR ACTUACIÓN
La leche y el agua (México)
COMPETENCIA UNIVERSITARIA
MEJOR CORTOMETRAJE
Nipon 96: Después del ruido (Perú)
MEJOR CORTO NACIONAL
El Inmortal (Bolivia)
MEJOR FICCIÓN
El Hueco - Fluido eterno (Bolivia)
MEJOR DOCUMENTAL
Nipon 96: Después del ruido (Perú)
MEJOR VIDEOCLIP
Joder (Bolivia)
MEJOR DIRECCIÓN
La compra del pan
Kathia Simon (Bolivia)
MEJOR FOTOGRAFIA
La dentadura (Bolivia)
MEJOR EDICIÓN
“..." Denisse Arancibia (Bolivia)
MEJOR GUIÓN
Al filo
Juan Darío Almagro (Argentina)
DOSSIER DE PRENSA
Diario EL DEBER – BRUJULA – Pág. 8
Santa Cruz de la Sierra, sábado 8 de septiembre de 2007
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